Energizer empieza a innovar en 1896 con la creación de la primera pila para el consumidor. El invento de W. H. Lawrence se concibió originalmente para los teléfonos fijos y pesaba alrededor de 1,5 kg, algo más que las pilas de hoy en día.

Dos años más tarde, Conrad Hubert, otro inventor, empleó estas pilas para crear su propio invento: la primera linterna de mano. En 1905, Lawrence y Hubert se asociaron para formar lo que originariamente se llamaba «The American Ever Ready Company».

A mediados de 1950, Energizer (aún con el nombre de Eveready) introduce las primeras pilas de tamaño mini para audífonos. Este invento ha sido clave en la creación de dispositivos más discretos que conocemos hoy día, los que permiten que las personas con dificultades auditivas puedan seguir con sus vidas sin la necesidad de llevar una carcasa para pilas de un tamaño exagerado.

El 9 de octubre, Lew Urry, el ingeniero canadiense de Eveready solicita una patente que cambiaría para siempre el sector de las pilas: la primera pila alcalina para los consumidores. La creación fue en 1959 y el aumento en el rendimiento y la duración fue tan significativo que, en 1999, el invento de Urry fue incorporado en el Museo Nacional de Historia Estadounidense de la Institución de Smithsonian.

Eveready, junto al desarrollo de la pila alcalina, creó el primer sistema de pilas recargables. De nuevo, esto supuso una mejora en el rendimiento que siempre se había considerado imposible de conseguir.

Energizer, con diseños de productos que siempre tienen en consideración el rendimiento y el planeta, introdujo en 1989 la primera pila añadida sin mercurio que le puso a la cabeza de las iniciativas medioambientales.

En otro momento clave, Energizer introdujo la primera pila de litio AA, que le permitió empezar a ofrecer el rendimiento necesario que exigen los dispositivos modernos de alto consumo.